La gran transición cósmica de la tierra: la inversión del eje de la rotación de la tierra

Al trabajar el Merkabah sobre distintos niveles, acabamos de constatar que el eje de la rotación de la tierra se invertiría todo semiciclo pléiadien, es decir alrededor  de cada 12900 años Es siempre cuando la posición del sistema solar se encuentra a veces en un mínimo de tensión de fuerzas cósmicas, vista su posición más distante de la constelación del León, a veces en un máximo de influencias de fuerzas cósmicas, vista su posición lo más cerca posible de la constelación de Acuario.

Cada vez tiempo inicial de León la temperatura de la atmósfera y del magma baja. Hace estrechar la corteza terrestre, causa hundimientos y puede traer a una glaciación. Esto explica la desaparición de Atlántida hace 12900 años. Va seguida de una subida de los mares cuando la temperatura remonta. Por el contrario, al tiempo inicial de Acuario, la temperatura de la atmósfera de la tierra y el magma sube como es el caso actualmente. Esto causa inflados de la corteza terrestre (volcanismo) y una fundición de los hielo. La subida de los mares inicialmente debería con todo progresivamente disminuir y ser prácticamente poco importante debido a la extensión de la corteza terrestre y luego a un enfriamiento a menos que la humanidad siga sus exacciones carbónicas hacia su medio ambiente.

En los dos períodos de transición, las actividades tectónicas serían lógicamente más intensas. La actividad volcánica por el contrario debería intensificarse solamente en el período de la entrada en la era de Acuario en cuál el fuego celestial, como el fuego del sol, debería producir fenómenos inusuales y extraños.

Entre los dos períodos las energías de la tierra cambian. A partir de la era de Acuario la humanidad y la tierra se orientan hacia la espiritualización del mundo material debido al impacto del aspecto espiritual de las fuerzas cósmicas más cercanas o más directas. Es entonces el círculo de orientación del agua y aire de que domina el equilibrio de su evolución. Era la base de la civilización Atlante cuyo antiguo centro de convergencia mundial parece encontrarse a Montserrat, no lejos de los Pirineos. Este centro es cerca 29° alejado de Gizeh. Indica una posición del eje invertido de la tierra en esta época. Gizeh se ha realizado cuando el ciclo de Atlante se terminaba en torno a la era del León. El círculo de orientación del fuego y la tierra entonces comenzó a orientar la humanidad y la tierra hacia el ciclo actual de la materialización de su vida. El fuego interno de la tierra era la causa de la desaparición de Atlantida. Causó el hundimiento en las aguas de su civilización y dio nacimiento al ciclo actual de división y conflictos que está terminándose actualmente.

La inversión del eje de la rotación de la tierra dio lugar a un cambio del círculo de orientación terrestre del ciclo anterior. El punto de convergencia se desplaza entonces hacia los Pirineos Orientales (Força Real) de 29°30, base del nuevo Merkabah de la tierra para el nuevo ciclo.  Los dos círculos fuego-tierra y aire-agua se cruzan en Gizeh. A cada inversión, alrededor de todos los 12900 años la tierra hace una rotación entre 162 en 172 sobre su ecuador grados para armonizarse con el medio ambiente galáctico. Luego, durante el nuevo ciclo, hacia el medio, el eje de la tierra se adapta alrededor de 12° grados. Eso hace una variación cíclica de los cambios de la inclinación del eje entre de 11 hasta 14°, 27° hasta 30° y  21 hasta 24°. Actualmente el círculo del aire y agua gana de nuevo terreno causando las perturbaciones actuales más y más fuertes de nuestras vidas.

 La Orientación del esfinge (el cadireta o león) de Montserrat hacia el oeste y el del pensador hacia el este (acuario) por una parte y el esfinge de Gizeh hacia el este (león) del otra parte me despertó la atención a este respecto. La primera configuración que es en toda evidencia más viejo que el segundo, siendo la memoria en forma de libro abierto de primer tiempo del tiempo de Atlántida. (EL Templo Abierto de Montserrat – Carmen Maymo Vicente /Editor: ACCI (Asociación. Cultural allí Científica Iberoameric.); Edición: 1 (17 de agosto de 2017 Colección: Lenguas allí Genes en EL Siglo XXI).

Estos cambios cíclicos me promovieron un estudio más profundo de la posición y evolución de nuestro sistema solar en la galaxia. Sería necesario coincidencias y una posición específica de la tierra en informe de los otros planetas para que tal inversión de su eje no sea solamente probable pero también posible. La experiencia del 5 de enero de 1889 de ver absorber el sol de la antimateria enseñó que este ajuste pide el paso en un vacío que permita el ajuste con las energías cósmicas. Es necesaria una posición específica de los planetas relacionados con el vacío o agujero negro del centro de la galaxia.

Era necesario pues buscar una posición de la tierra donde esté orientada más directamente hacia el centro galáctico en informe del sol y los otros planetas. La elección es limitada y nos conduce hacia el solsticio del verano en que la tierra es inclinada hacia el sol y máximamente expuesta al centro galáctico. Luego, es necesario que los otros planetas se encuentren en posición favorable para causar una relación de barrera de ruptura con la tierra. Al buscar, hemos recorrido los próximos años.

El 21 de junio de 2019 se presenta una primera situación significativa. Pero no parece llenar todos los elementos de coincidencias. Es finalmente el año 2021 (20 y 21 nombres significativas) que parece más probable. Jugando con la configuración de los planetas salió el 24 de junio de 2021 como el principio de la gran transición, anunciado como el paso de 3 días y 3 noches de oscuridad tal como se describe entre otras en los Códices de los Mayas y el libro de la Apocalipsis. La tierra parece entonces encontrarse sobre un cruce, que menciona el Merkabah local, entre nuevas fuerzas viniendo del centro Kali de las Pléyades y las viejas fuerzas del centro de la galaxia, reforzado por la posición de Urano. El uraeus o la serpiente de los ciclos parece morder en su propia cola para cerrar el movimiento del ciclo pasado.

Marte, Venus, el sol, Mercurio, Júpiter y Saturno se situarán entonces en una línea que forma una clase de barrera como un relámpago que recibe en su corazón (Mercurio y sol) los impulsos destructivos de Plutón, mientras que la tierra está en el eje del punto Kalki en Pegaso, punto de orientación y atracción del universo local  hacia el Grand Atractor bajo la influencia de Neptuno. Una clase de túnel de oscuridad de alrededor 55h (¿el 24 a partir de 5:00 hasta el 26 al mediodía?) puede formarse en que solamente la luz cristalina del Merkabah sería visible por los que se conectan allí por su conciencia de unión.

También cambios sobre el aspecto físico de la luna parecen inevitables debido a que se aislará en ese momento en el eje sol-tierra-centre galaxia. Probablemente, se confirmará su división dejando tres lunas como supimos comprender desde enero de 1989 por información celestial. A partir de este fin del mes de octubre, nos permanece pues 32 meses durante los cuales señales de advertencia deberían intensificarse. Hay que prever que fuertes perturbaciones electromagnéticas se manifestarán debido a la reducción temporal del campo magnético de la tierra, aunque eso no causaría una inversión de su polaridad. Cualquier funcionamiento de instrumento electrónico, sensible a este respecto, puede temporalmente estar comprometido y especialmente los aviones al momento de la obscuridad. Precauciones que deben tomarse se impondrán. Muchas señales precursores de naturaleza distinta alertarán nuestra atención.

Humanamente no tengo certeza antes de las pruebas, sino un fuerte sentimiento de probabilidad y muchos avisos en este sentido. Luego, coincidencias que hacen referencia al sentido espiritual de estos acontecimientos nos refuerzan este sentimiento. El 24 de junio es la fiesta de San Juan Baptista. Simboliza por esta nueva era el bautismo de la humanidad en las aguas originales del espíritu crístico de unión. El 25 de junio es la fiesta de San Cristóbal. Transporta simbólicamente la antigua conciencia individualista de la humanidad sobre las aguas turbias de los cambios hacia las aguas claras de la vida inteligente (acuario) de la nueva conciencia de unión de una nueva raza. El 26 de junio es la fiesta de Santa Anna (la gracia divina) y San Joaquín (Dios pone de pie), los padres de la Madre del Cristo, indicando un nuevo apoyo por una nueva tierra, puesto de pie y un nuevo cielo ajustado.

El ángel que me guio en este trabajo es el ángel de la obediencia a la escucha de la voluntad del plan divino. La energía que lo acompañó en esta investigación es mencionada por las runas Win de la felicidad, Sigel de la Victoria y Eolh de la protección.