La luz es siempre más fuerte que la oscuridad
Donémonos una prueba de nuestra fe y confianza en la vida. Restableciendo la unión entre nuestros cuerpos y espíritus el potencial creativo de nuestra alma se libera y nuestra conciencia es capaz de pasar enzima de los miedos y de la fatalidad.
El virus de Covid es un desafío para la humanidad de reconectarse con la energía universal de las fuentes de la vida y la transparencia de la verdad. Pide nuestra unión espiritual interna y externa para que su fuerza creativa de protección, purificación y sanación se transmita tanto a los vacunados como a los no vacunados.
En concreto: Hacemos tres veces al día 3 minutos (mañana, medio día, noche) silencio en fin de abrirnos a la fuerza creativa de la energía universal.
Imaginemos el universo del mundo manifestado y no manifestado unificado. Se representa como un espacio-tiempo infinito con la luz de todas sus posibilidades que se manifiesta por la flor de la vida. Todos los elementos de cualquier manifestación están conectados con ella desde su centro formando círculos (toroides - en forma de rosquillas) que, por su movimiento giratorio, están interconectados y forman una unión. El universo unificado se representa por los círculos de la flor de la vida. Sus pétalos indican las diferentes situaciones y niveles de manifestación.
El esquema siguiente da una visualización de esta unión a través el corazón del ser humano.
La práctica:
Abrámonos nuestro espíritu vía nuestro corazón a la luz de unión del universo que nos rodea como un toroide que por su movimiento giratorio esta interconectado con todos los centros (toroides) de luz, manifestados y no del universo.
Desde nuestro corazón visualicemos nuestra conexión y unión con todos los centros de luz del universo. Aceptemos que esta luz de unión purifica, sana y protege nuestro cuerpo, nuestra familia, nuestros amigos, nuestro entorno, país, continente, el mundo entero y todo lo que contiene. Hacemos sin forzar totalmente en confianza, siguiendo simplemente con la respiración la intensidad de su flujo de amor y sabiduría que nos transmite.
Al fin seamos consciente que esta práctica, repartida en el mundo, está creando alrededor de toda la planeta una cadena continua de energía salvadora cuya fuerza solidaria de unión liberará a todos que permiten aceptarla.
A compartir con
todos que creen en la vida.